En el trabajo de un prevencionista es importante ser líder. Ser capaz de influir en las personas por medio de la seguridad, de la conciencia, por medio del autocuidado, por medio de esa relación que tenemos con el que está al lado. Sentirnos parte de un ambiente laboral que fundamenta su existir en la relación entre productividad y seguridad, debe ser lo que nos debe mover a ser cada día mejores en nuestros trabajos.

Un líder es una persona que mueve masas, que entrega mensajes de claridad y que tiene plena convicción de sus ideas. Un líder es un ente empático, creador, un facilitador y muleta dentro del proceso de crecimiento y educación. Un prevencionista debe, si lo vemos así, ser un líder de excelencia.

Trabajar en equipo o dirigir equipos de trabajo requiere tener plena confianza de quienes componen ese equipo. Darnos cuenta que todos somos diferentes y que aportamos al trabajo de distintas maneras, pero con igual nivel de responsabilidades y compromisos. Un líder es capaz de identificar esas capacidades, que muchas veces están escondidas, y valorarlas. Hacerlas públicas en ese equipoy potenciar a que crezcan, así crecerán nuestras participaciones. Además, dar instancias para comunicar las ideas de cada persona del equipo, ya que pueden tener ideas geniales que fortalezcan al equipo y a cada uno en particular.

Ser líder es ser mediador en tiempos de conflicto, no buscar culpables, sino responsables. Evidenciar que la responsabilidad puede que sea compartida y que aun cuando seamos líderes también tenemosresponsabilidades directas o indirectas en estos conflictos.

Para ser líder finalmente debemos decir “Creo en ti, creo en mí, creo en lo que podemos construir, creo que podemos ser fuertes. Pero cuidémonos, pongamos nuestras vidas en protección. YO TE CUIDO y TU ME CUIDAS”. Cuando logremos esto, seremos Líderes en Prevención.